El RÍO es una corriente continua de agua que fluye entre dos puntos de la superficie terrestre. El lugar de origen se llama nacimiento y donde finaliza su recorrido recibe el nombre de desembocadura. Los ríos pueden desembocar en el mar, en un lago o en otro río.
El curso de un río se divide en tres tramos: Alto, medio y bajo.
El curso alto se caracteriza por tener mucha pendiente (desnivel que tiene un cauce debido a la rugosidad del suelo), y un caudal irregular, además de tener una corriente muy rápida y con fenómenos de erosión muy intensos; el curso medio tiene un mayor caudal y una pendiente más suave, por lo que la velocidad del agua es menor; y el curso bajo discurre por terreno prácticamente llano, y la corriente se hace muy lenta.
Cuando una corriente de agua fluye por un terreno formado por roca dura seguida de otra blanda, esta última sufre un mayor desgaste y se forma un desnivel; y en el caso de estos estratos estén dispuestos horizontalmente, es frecuente que se origine una cascada.