El SISMÓGRAFO es un aparato registrador que capta las vibraciones de las ondas sísmicas que viajan a partir del centro del disturbio. Éste funciona según el principio de un péndulo cuyo extremo libre permanece estacionario, o casi, cuando se mueve el punto de soporte. Durante un terremoto se mueve todo el sismógrafo, incluido el registrador, con la excepción de un astil fuertemente contrapesado que oscila libremente en sentido horizontal o vertical; es el movimiento del sismógrafo en relación con el extremo de este astil el que es ampliado ópticamente en un tambor de rotación continua.